VUELTA AL FUTBOL EN GLOBO

Independiente ganó ante Huracán y suma 13 por Superliga.

Cuando se pensaba en la previa, allá por comienzo de semana, si Independiente podría superar la falta de titulares, la dupla central nueva, tantas lesiones, nadie hubiese arriesgado que el equipo daría tremenda señal futbolística en este partido. Porque fue extremadamente superior a su rival, con jugadores en altísimo nivel, ante un rival siempre duro, y con el renacer de la idea madre de este cuerpo técnico.  

 

Es imposible analizar la primera etapa de Independiente sin mencionar la vuelta del factor que hizo a este equipo respetado y temido: la presión.

 

En todas las zonas del campo, no era alta, pero extremadamente intensa. No dejaba que el rival saltara líneas con pelotazos porque se paraba compacto, pero en el círculo central comenzaban a presionar a fondo. A esa recuperación rápida se le agregaban las transiciones veloces con superioridad numérica.

 

Con muchos metros a sus espaldas, los centrales de Huracán sufrían muchísimo. A ese lugar fue la primera bochineada de Gaibor que dejó solo a Gigliotti para que definiera mano a mano.

 

Abría el marcador el Rojo temprano para empezar a dominar definitivamente el partido. Buenas combinaciones, mucha velocidad, recuperación rápida, pero sin precisión en los últimos metros.

 

Grandes intervenciones de Gaibor, con el pie caliente, con la diez en llamas. Algunas buenas de Cerutti, Meza que se acordaba como era Meza, el 9 buscando seguir sumando en su cuenta personal, muchas buenas cosas le pasaban a los que por hoy usaban la rosa.

 

También había de las otras, Bustos errático, Benítez necesitando minutos, Sánchez Miño decidiendo mal, pero eran las menos.

 

Tuvo algunas el Globo, claras, para empatarlo. Es que Independiente era profundo, pero volvía a ser impreciso en la definición. Quizás por eso no fue 3 a 0 o 1 a 1 el final del primer tiempo.

 

En la segunda etapa Independiente volvía desde el principio a tener el dominio posicional y de la pelota. Gaibor seguía siendo el compás del Rojo y el equipo se sentía aplomado.

 

Huracán intentó los primeros minutos seguir en el partido, pero Independiente filtraba incontables pelotas que seguía dilapidando. La 10 flotaba en la zona central y el futbol aparecía.

 

Pero fue de un error de Huracán de donde vino el segundo del Rojo. Chocaron central y lateral en un cruce y Gigliotti aprovechó para asistir a Benítez que definió tomándose su tiempo.

 

Con el 2 a 0 tocaban y jugaban todos. Levanto Benítez que agarró la manija del equipo, pero todas las que se generaban se erraban. Era figura Marcos Díaz.

 

Y de tanto ir y no concretar, el Rojo sacó el pie del acelerador y Huracán descontó casi sin querer.

 

Cachetazo para que Independiente vuelva a pisar fuerte. Dominio Rojo para lo que restaba del partido y, al fin, pudo sellar el encuentro.

 

En otro error de Huracán, que iba por el empate, Gigliotti quedó mano a mano y puso el 3 a 1, cruzado de derecha abajo.

 

Vuelve a ganar el equipo de Ariel Holan, para dejar atrás lo malo y enfocarse en la pelea que le queda.

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