El equipo de Julio César Falcioni jugó su mejor partido en el ciclo, sintiéndose cómodo en las distintas variantes del momento ofensivo para aprovechar los espacios y desatenciones del rival. Pudo traducir su superioridad en el resultado mientras que sigue firme defensivamente.
Un encuentro clave tenía el Rojo ante un Rival que venía de empatar en la Bombonera ante Boca y con Talleres en Junín. Para este partido, el técnico incluyó a Sebastián Palacios por Andrés Roa en relación al último encuentro para rearmar el tridente ofensivo, con Lucas Romero y Lucas González ocupando la mitad de la cancha. Por último, la línea de cinco que ya sale de memoria.
Ofensivamente, a Independiente se lo vio cómodo en las distintas variantes que ofrece esta fase: supo como mover la pelota por todo el ancho del campo gracias a la amplitud que le proveen los laterales. Ayer completó los 17 disparos, una nueva marca en estos seis partidos, superando los 16 ante Villa Mitre. Sin duda hablamos de un equipo totalmente volcado a explotar el momento ofensivo llegando con mucha gente a zona de finalización.
También aprovechando los espacios que generan los delanteros descendiendo y arrastrando marcas como en este gol, el 2-o de Silvio Romero.
También fue importante la actuación de Lucas Romero en fase ofensiva, sabiendo atacar la zona entre los defensores y volantes rivales para generar superioridad y ser criterioso a la hora de resolver en los últimos metros, asistiendo en dos oportunidades a Sebastián Palacios. Siempre con la idea de ser anchos y profundos con los laterales y los delanteros.
Pero también supo resolver distintas situaciones donde se pedía un ataque más directo, buscando a los delanteros a la espalda de los defensores o utilizando las transiciones ofensivas para resolver rápido y en pocos toques, como el primer y el sexto gol. En lo que respecta al momento defensivo, Sarmiento intentó jugar a las espaldas del "perro" con Sergio Quiroga y poniendo tres delanteros para atacar los espacios que podían dejar los tres centrales cuando salían a contener al 10. Si bien tuvo situaciones con esta estrategia, no pudo pesar por los distintos errores y desatenciones que decantaron en los goles de Independiente.
Para resaltar en este aspecto la solidez que se construyó con los tres centrales, sobre todo con la llegada de Juan Manuel Insaurralde que pudo potenciar a sus compañero de saga, ganando terreno en el juego aéreo y en los duelos terrestres. Sin duda, el encuentro de ayer coronó el trabajo que se viene realizando desde la primera fecha para afianzar un equipo desde una idea y desde los nombres. Sin embargo, se vienen dos encuentros muy importantes por delante (Vélez y Boca) con la posible salida del líbero del equipo a la MLS. Se vienen semanas de mucho trabajo para Falcioni pero respaldado por los resultados y el rendimiento.
