En la semana que comienza los dirigentes de Independiente tienen varios frentes que resolver en cuanto al mercado de pases. En primer lugar poder cerrar el pase de manera definitiva de Emiliano Rigoni al Zenit de Rusia, donde su representante Juan Cruz Oller está haciendo las gestiones consiguiendo los avales.

De ese cierre de pase es la llave de apertura para el delantero que quiere Ariel Holan: Raúl Bobadilla, el delantero que juega en Alemania, y por el que solo dejarían ir si por una venta. El emisario de Independiente intentó sacarlo por la vía del préstamo, aunque sin éxito.

El otro conflicto (en el que Independiente no tiene nada que ver) es el de Gastón Silva quien tiene todo acordado y se entrena con el plantel pero como la FIFA entiende que el jugador pertenece a los Pumas de la UNAM el Rojo deberá llegar a un acuerdo con los mexicanos quienes pretenden un resarcimiento (más allá del millón seiscientos mil dólares que cuesta el pase según el Torino, dueño del uruguayo) ya que la madre del jugador había firmado un contrato. Por tal motivo es posible que el jugador deba resignar parte de su dinero para quedarse en Avellaneda.

Como si todo eso fuera poco también puede empezar a cerrarse la partida de Martín Benítez.