Cada vez que aparece el presidente de Independiente es noticia, porque el hombre al club no le dedica tiempo. Y cuando va a ver a los jugadores es como una visita de un primer mandatario a un país inhóspito.

Lo cierto es que casi como un milagro de la vida, Hugo Moyano apareció para dar la cara ante el plantel profesional y firmar el acuerdo.

El presidente del club se reunió con los jugadores y participó de un largo almuerzo después del entrenamiento. Fue la primera vez en el año en la que la máxima autoridad de la institución tuvo contacto con los futbolistas. ¡Milagro!

Por supuesto que tal acontecimiento debía tener la foto de rigor. Y así posaron todos: Silvio Romero, Sergio Marchi, Héctor Maldonado, Lucas Romero y Sergio Palazzo, junto al presidente. Lo que no llamó la atención fue la ausencia de Pablo Moyano, el vice del club que es mirado siempre de reojo por los jugadores por sus innumerables promesas incumplidas.

Los cierto es que a Moyano no le quedó otra que pasar del otro lado del mostrador. Acostumbrado a defender a los trabajadores por falta de pago, ahora se tuvo que poner la pilcha de aquel empresario al que más de una vez le mete lo camiones en la puerta.

Moyano les trajo una propuesta a los futbolistas para pagarles la deuda: primero cobrarán los futbolistas más jóvenes, quienes tienen salarios más bajos y mayores urgencias económicas: todos ellos cobrarán en tres cuotas. Luego les pagarán a los más experimentados, con el dinero que ingrese por la participación de la Sudamericana, entre otras fuentes de ingresos que fueron detalladas en el informe que les entregaron a los referentes del equipo.

Después de una larga conversación, todos estamparon la firma para hacer oficial el acuerdo y posar para la foto.