Luego de la compleja clasificación a octavos de final de la Copa Argentina que consiguió Independiente frente a Atlético Tucumán, Eduardo Domínguez tomó una inédita decisión. El entrenador determinó no hablar en conferencia de prensa, algo que sucede por primera vez desde su llegada al Rojo.
La principal razón de este hecho sería la falta de refuerzos, que desde un tiempo a esta parte el DT continúa esperando y aún no tiene certezas por parte de la dirigencia. Este motivo también podría ser causante de una drástica consecuencia, producto de que el ex-Colón estaría dispuesto a dejar la dirección de los de Avellaneda si esta situación se prolonga.
Por el momento, el arribo de Iván Marcone fue la única incorporación y si bien sumó calidad al plantel, el mismo aún es corto. Y a la falta de llegadas de nuevos jugadores, se le suman las bajas y las negativas, ya que Gerónimo Poblete abandonaría la institución para pasar a Lanús luego de que finalice su contrato y Rodrigo Aliendro jugaría en River pese haberle dado el sí a los Diablos en un principio.
Y en este panorama se encuentra Domínguez, que frente a las pocas altas y muchas salidas, pensaría en abandonar el club producto de que no se siente acompañado por los directivos, que en su momento le prometieron jerarquizar el equipo para competir en los distintos torneos y que por ahora no se estaría dando.
