
Se suspendió el partido entre Independiente y Platense. La Agencia de Prevención de Violencia en el Deporte (Aprevide) dispuso la suspensión y reprogramación del encuentro, que iba a disputarse el domingo por la fecha 6 de la Zona B del Torneo Clausura, a raíz de los gravísimos incidentes el miércoles en el Libertadores de América-Ricardo Bochini. De esta manera, el partido no se jugará, a pesar de que la Justicia inicialmente había dejado abierta a la puerta a que se juegue sin público en Avellaneda o en otro estadio.
Este viernes, la Fiscalía N° 4 de Avellenda que investiga los incidentes ocurridos el pasado miércoles en el Libertadores de América entre barras de Independiente y de Universidad de Chile había solicitado que el Rojo no pueda jugar en su estadio con público. Ante esto, el Juzgado de Garantías N°3, a cargo de José Luis Arabito, primero había decidido que el club de Avellaneda pueda jugar en su club, pero solo a puertas cerradas. Eso si, dejó la posibilidad abierta para que lleven hinchas si mudan la localía.
Cómo quedó el Libertadores de América tras los destrozos
El estadio de Independiente fue el escenario de uno de los sucesos más violentos de los últimos años en el fútbol sudamericano. Las imágenes tomadas una vez finalizada la barbarie demostraron con más claridad los estragos: puertas arrancadas, portones, baldosas, restos de inodoro y de bachas, un lugar de comida desmantelado, caos en un lugar de limpieza que dejó palos de escoba y baldes tirados. Además, caños de agua y conexiones eléctricas también se vieron afectadas. Este fue el saldo que dejó la noche de terror de este miércoles.
Ante esto, Independiente se escuda de haber seguido las recomendaciones de la Conmebol y de la seguridad de la Provincia de Buenos Aires para no recibir ninguna sanción, tal como expresó el presidente Néstor Grindetti en Asunción. Sin embargo, las posibilidades de sufrir consecuencias son más altas: posible expulsión de la Copa Sudamericana y varios partidos sin público.