El único resultado que no les servía era el empate. El que ganaba clasificaba. La igualdad los dejaba con un pie afuera. Y empataron. Talleres necesitaba lo que pasara en las otras canchas y al "rojo" no le servía para nada. Independiente ganaba bien 2 a 0 y se fue al descanso con superioridad numérica. Pero volvió dormido y los cordobeses se lo empataron en dos minutos. A partir de ahí, fueron, vinieron, buscaron, intentaron, chocaron con buenas respuestas de los arqueros, con malas definiciones de sus jugadores, terminaron 2 a 2 y se despidieron de la Copa de la Liga.

Tras una serie de pases y rebotes por la zona derecha del campo, Lucas González sacó un centro perfecto a los 34 minutos que pasó por todo el área y llegó a la cabeza de Sporle, quien puso por esta vía el 1 a 0 para el equipo de Avellaneda. Ya en el final del primer tiempo, Ruben Martínez quedó bien ubicado para definir pero en la trayectoria, Miguel Navarro puso la mano y penal para Independiente después de la revisión en el VAR. Además, por doble amarilla, se fue expulsado el venezolano. Canelo se paró frente al balón y puso el 2 a 0.

En apenas cuatro minutos, Girotti sacó un remate fuerte desde afuera del área que dio en la pierna izquierda de González y se metió envenenada por encima de Rodrigo Rey para el descuento. Y en apenas dos minutos, Benavidez empató después de un centro de Ramiro Ruiz Rodríguez ante una defensa del Rojo inmóvil.

Después hubo situaciones de los dos lados, Herrera se convirtió en figura y los jugadores de Independiente se fueron envueltos en una silbatina del "Libertadores de América".